Oración del primer domingo: El Papa León XIV advierte: “¡Nunca más la guerra!”

El nuevo Papa León XIV aprovechó su primera oración dominical en la Plaza de San Pedro para hacer un llamamiento a la paz para todo el mundo. Desde el balcón de la Basílica de San Pedro, el nuevo jefe de la Iglesia católica gritó: "¡Nunca más la guerra!". El primer pontífice procedente de los Estados Unidos, el anterior cardenal Robert Francis Prevost, fue aclamado repetidamente con gran entusiasmo. Se escucharon varios cánticos de su nombre en italiano: “¡Leone, Leone!”. Según estimaciones de la policía, en la Plaza de San Pedro se reunieron más de 100.000 personas.
El nuevo Pontífice recordó el final de la Segunda Guerra Mundial, que se cobró 60 millones de vidas, hace casi exactamente 80 años. León XIV dijo que el mundo de hoy vive “el dramático escenario de una Tercera Guerra Mundial librada a pedazos”, haciendo eco de una frase acuñada por el Papa Francisco. Por eso, al igual que su predecesor, quiere “dirigirse a los grandes del mundo con un llamamiento siempre presente: ¡Nunca más la guerra!”.

Como obispo en Perú, el nuevo Papa se ha ganado la reputación de ser un luchador contra la pobreza, la destrucción del medio ambiente y la injusticia.
León XIV también abordó las guerras en Ucrania y en la Franja de Gaza. Dijo que llevaba en su corazón el “sufrimiento del amado pueblo ucraniano” y pidió negociaciones que llevaran a una “paz genuina, justa y duradera”. Los presos deben ser liberados y los niños deben ser devueltos a sus familias. “Lo que está sucediendo en la Franja de Gaza me duele profundamente”, dijo, pidiendo un alto el fuego inmediato, corredores humanitarios libres y ayuda para la población civil afectada, así como la liberación de todos los rehenes. Acogió con satisfacción expresa el anunciado alto el fuego entre India y Pakistán. Esto debe llevar tiempo Concluyó su llamamiento pidiendo el “milagro de la paz”.
El ex misionero y líder de la Orden Agustina, de 69 años, fue elegido el jueves como sucesor de Francisco y el 267º Papa en la historia de la Iglesia. En uno de sus primeros viajes fuera del Vaticano, León XIV visitó la tumba de su predecesor: él mismo se hizo llevar a la Iglesia de Santa María la Mayor de Roma, donde se encuentra el lugar de descanso final del argentino. Oró ante la tumba y depositó una rosa blanca.
La gran misa solemne de inauguración está prevista para el domingo de la próxima semana, siempre en la Plaza de San Pedro. Se espera que asistan invitados de Estado de todo el mundo. Se espera que el vicepresidente JD Vance asista desde Estados Unidos, el país natal del nuevo Papa.
süeddeutsche